Te proponemos algo: Hoy no salgas de casa a cenar. Enciende el equipo de sonido, pon la música que más te guste para relajarte y engríe tus sentidos con el disfrute de un verdadero manjar. Podrías compartirlo con quien más quieras…o disfrutarlo sin que nadie lo sepa!
Sólo necesitas:
1/3 taza de mantequilla derretida
1 lata de leche evaporada
3/4 taza de azúcar
1 paquete de gelatina sabor de limón, disuelta en 1 taza de agua hirviendo
1/4 taza de jugo de limón
1 cucharadita de ralladura de limón
150 grs de galletas de vainilla
La leche, mantenida desde la víspera en el congelador, se bate hasta que esté bien espumosa. A eso le añadimos el azúcar gradualmente, mientras se continúa batiendo.
Luego se agrega el jugo de limón, la ralladura y la gelatina ya fría. Se vacía esta mezcla en un molde y se lleva a la refrigeradora hasta que cuaje.
Para servir, desmoldamos con mucho cuidado y lo cubrimos con las galletas desmenuzadas en la mantequilla derretida.
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